Si sufres de ansiedad o depresión ¿dónde irías primero, a un pastor, o a un psiquiatra o psicólogo? Nuestra primera reacción podría tener que ver con los costos. ¿Pastor gratuito o consejero costoso? ¿Hay que preguntar? Sí, debemos. Los consejos que recibimos y las acciones que tomamos pueden resultar en consecuencias que podrían cambiar nuestra vida o hasta ponerla en peligro. Asimismo, algunos casos requieren un psiquiatra que pueda prescribir medicamentos para enfermedades como la depresión clínica que requieren asesoramiento y medicamentos recetados.
Podemos plantear otras preguntas como “¿Podría un consejero ateo aconsejarme mejor que un pastor creyente?,” o, ”¿Podría un pastor o teólogo darme consejo equivocado?” Sin duda, no podemos dejar de lado las Escrituras. De hecho, más de una persona ha llegado a la conclusión de que, en última instancia, podemos encontrar las ideas valiosas de la psicología en la Biblia. No importa cuál sea el problema, todo “plan de tratamiento” debe incluir la oración. Sin embargo, cuando estudiamos la consejería y trabajamos en el ministerio, debemos analizar estas preguntas y llegar a posiciones bíblicas y prácticas.
Ministerios LOGOI ofrece un curso en línea FLET de ocho semanas basado en el libro, El arte de aconsejar bíblicamente por Larry Crabb, que explora estas y otras preguntas. También te lleva paso a paso a través del enfoque particular a la consejería cristiana de Crabb. Cada curso incluye el libro de texto, la guía de estudio y el examen.