Los fundadores de todas las religiones conocidas del mundo han muerto… ¡y siguen muertos! Pero nuestro Salvador predijo su propia resurrección y cumplió su promesa:
“Entonces los judíos respondieron y le dijeron: Ya que haces estas cosas, ¿qué señal nos muestras? Jesús respondió y les dijo: Destruid este templo y en tres días lo levantaré. Entonces los judíos dijeron: En cuarenta y seis años fue edificado este templo, ¿y tú lo levantarás en tres días? Pero El hablaba del templo de su cuerpo. Por eso, cuando resucitó de los muertos, sus discípulos se acordaron de que había dicho esto; y creyeron en la Escritura y en la palabra que Jesús había hablado” (Juan 2:18-22).
La resurreción ya cumplida nos da la certeza de que nuestra fe no es en vano (1 Corintios 15), nuestros pecados han sido perdonados (Efesios 1:7), y nuestro Salvador vive para escuchar nuestras oraciones y ayudarnos (Hebreos 4:14-16).
En ese espíritu de fe y comunión con nuestro Salvador, esta semana nos complace obsequiarles el libro de Dan Thompson, Conversaciones Francas: Reflexiones sobre la oración en los Salmos. Esperamos que sea una fuente de inspiración para buscar una comunicación íntima con Dios.
¡Feliz Pascua de Resurrección!
En Su nombre,
Ministerios LOGOI