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SERIE: MUJERES DE LA BIBLIA
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BASE BÍBLICA: Génesis 24
OBJETIVO: Que los niños comprendan la importancia de pedir siempre ayuda al Señor y aprendan a relacionarse con las personas adecuadas.
VERSÍCULO: “Pon tu vida en las manos del Señor; confía en él, y Él vendrá en tu ayuda”. —Salmo 37:5.
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INTRODUCCIÓN
Comience la clase mirando un libro, muestre a los niños su libro y comente como éste contiene una historia con un inicio, desarrollo de una historia y un final. Comente que para Dios nuestras vidas son como ese libro ya que Él conoce todo sobre nosotros, nuestro comienzo, nuestras dificultades y hacia dónde vamos a llegar.
DESARROLLO
Recuerde a los niños la clase anterior y comente que el pequeño Isaac creció y sus padres deseaban que se casara con una mujer que amara a Dios tanto como ellos. Pero las personas que vivían cerca no amaban a Dios, por lo que Abraham envió a su siervo a buscar una mujer especial para su hijo, alguien que amara a Dios y le siguiera.
Explique a los niños que hay personas que no conocen a Dios y que podemos tener amigos que no asistan a la iglesia, pero no podemos relacionarnos con personas que hagan cosas incorrectas, que desobedezcan la palabra del Señor, como robar, mentir, etc. Es importante que seamos ese puente para que las personas puedan conocer a Dios, pero nunca debemos dejarnos influenciar para desobedecer los principios de Dios.
El siervo de Abraham tenía una difícil misión, así que oró al Señor para que lo guiara. Cuando llegó cerca de un pozo vio a Rebeca, ella era una joven muy hermosa y no sólo le dio de beber a él, sino también a los camellos que llevaba —por esto entendemos que Rebeca era una joven hospitalaria y generosa, que estaba dispuesta a ayudar a quien lo necesitaba. El siervo entendió que ella era la mujer que estaba buscando para Isaac por lo que le ofreció hermosas joyas y le pidió que lo llevara a la casa de su padre. El siervo explicó a la familia de Rebeca el motivo de su visita, ellos estaban asombrados, pero le preguntaron a Rebeca si deseaba ir con el siervo para casarse con Isaac. Ella respondió que sí, así que su familia la bendijo y emprendieron el viaje de regreso. Cuando Isaac y Rebeca se conocieron se enamoraron inmediatamente y se casaron.
No es fácil tomar decisiones, pero con la ayuda de Dios las cosas resultan mejor, por eso debemos tener siempre presente Sus enseñanzas para caminar por el camino correcto y confiar en que Él cuida siempre de nosotros.
CONCLUSIÓN
Cuando queremos hacer las cosas a nuestra manera, no estamos confiando en el Señor. Los padres de Isaac confiaron en que Dios le daría a su hijo la esposa que necesitaba. Rebeca fue la respuesta de Dios para ellos porque pusieron toda su confianza en las manos de Dios. Confiar es creer que Él quiere y hará lo mejor para nuestra vida, aun cuando pasamos por dificultades. Al igual que ellos, ustedes pueden confiar en Dios cuando enfrentan situaciones difíciles porque Él se preocupa de cada detalle en nuestras vidas —y no olviden que la obediencia trae buenas consecuencias.
Oración: “Amado Señor, ayúdanos a confiar siempre en ti y a aceptar tu voluntad, en el nombre de Jesús, Amén.”
MANUALIDAD SUGERIDA
Caja Libro: Con una caja de zapatos o cualquier caja de cartón podemos crear un “libro”. En su interior podemos dejar cosas valiosas o importantes, recuerdos, fotos, cartas o tarjetas que hayamos recibido, alguna foto de nuestros abuelos, un peluche favorito, etc. Todo lo que nos recuerde la historia de nuestra vida.
Podemos forrar la caja con materiales a elección y también podemos poner un título especial a nuestro libro.
Lo más importante es pegar el versículo de la lección el cual nos recordará que debemos dejar todo en las manos del Señor.
Ofrecemos dos ejemplos:
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