PREGUNTA:
¿Cuál es la situación de los inalcanzados, que nunca escucharon el evangelio y mueren, se van al cielo o al infierno? Favor la respuesta con sus respectivos textos.
RESPUESTA:
Esta es una pregunta que muchos han hecho. San Pablo da clara respuesta, diciendo: Porque la ira de Dios se revela desde el cielo contra toda impiedad e injusticia de los hombres que detienen con injusticia la verdad; porque lo que de Dios se conoce les es manifiesto, pues Dios se lo manifestó. Porque las cosas invisibles de él, su eterno poder y deidad, se hacen claramente visibles desde la creación del mundo, siendo entendidas por medio de las cosas hechas, de modo que no tienen excusa (Romanos 1:18-20).
Claramente Pablo declara que Dios por medio de su revelación natural —la grandiosa belleza de todo lo que Dios ha creado— le ha dado oportunidad a todo hombre que jamás ha nacido la oportunidad para conocerle y para buscarle. Añade que cada persona que ha rechazado esa revelación sufre la ira de Dios. Como aclara en Romanos 9:14-16: ¿Qué, pues, diremos? ¿Que hay injusticia en Dios? En ninguna manera. Pues a Moisés dice: Tendré misericordia del que yo tenga misericordia, y me compadeceré del que yo me compadezca. Así que no depende del que quiere, ni del que corre, sino de Dios que tiene misericordia. De maneras que tú y yo no vemos ni comprendemos, Dios a través de las edades ha manifestado Su misericordia a esta humanidad no merecedora.
No tengo idea cómo es que Dios cumple estas verdades cuando las aplicamos a la jungla amazónica, o a las grandes metrópolis del mundo donde viven millones que no han oído claramente el mensaje de la salvación en Jesucristo, pero descanso en dos cosas: 1. la innegable justicia y misericordia de Dios. 2. En la promesa que nos ha dado de que ante Su glorioso trono un día habrá gente de toda nación y tribu que ha existido en el mundo: Apocalipsis 5:9: Digno eres de tomar el libro y de abrir sus sellos; porque tú fuiste inmolado, y con tu sangre nos has redimido para Dios, de todo linaje y lengua y pueblo y nación; y nos has hecho para nuestro Dios reyes y sacerdotes, y reinaremos sobre la tierra.
Les Thompson